Envases que venden: ¿qué tanto influyen en la elección del consumidor?

En un mercado cada vez más saturado por la llegada de nuevos productos, la presentación de un envase se convierte en un poderoso imán que influye directamente en las decisiones de compra. Según Gitnux, el 52 % de los consumidores afirma que el diseño del envase impacta en sus elecciones, y el 70 % estaría más dispuesto a comprar si este incluye un mensaje personalizado.

Estos datos cobran mayor relevancia si se considera que el 60 % de las decisiones de compra se toman en el punto de venta, donde el diseño, los colores y la forma del envase pueden ser determinantes para destacar frente a la competencia. Para Eduardo Pérez, gerente de Marketing de Tetra Pak, la primera impresión puede marcar la diferencia entre ser elegido u olvidado.

“Un envase capaz de destacar en los estantes no solo atrae miradas, sino que también transmite el valor y la promesa de la marca en segundos. Así, el atractivo visual se convierte en un puente emocional entre el producto y el consumidor”, afirma el especialista.

La innovación en el diseño de envases evoluciona para responder a las expectativas de consumidores cada vez más exigentes, que buscan experiencias personalizadas, seguras, interactivas y sostenibles. En esa línea, Pérez identifica cinco tendencias clave que están transformando la manera en que las marcas conectan con su público a través del envase:

– Personalización: permite adaptar diseños, colores y mensajes a segmentos específicos, generando una conexión emocional única y aumentando el valor percibido del producto. Además, se desarrolla en diferentes formatos o tamaños, desde presentaciones individuales hasta formatos familiares que optimizan practicidad y ahorro.

– Seguridad: garantiza la integridad y calidad de los alimentos mediante tecnologías como el envasado aséptico, que evita la contaminación y prolonga la vida útil sin conservantes. Los envases de cartón de Tetra Pak destacan por incorporar esta tecnología junto a múltiples capas protectoras que bloquean oxígeno, bacterias y contaminantes externos, asegurando una experiencia de consumo segura.

– Interacción digital: integra códigos QR, realidad aumentada y otras herramientas que ofrecen información, juegos o promociones exclusivas, ampliando la experiencia más allá del punto de venta. También suma sistemas de trazabilidad que permiten seguir la cadena de suministro desde la producción hasta el consumo, reforzando la transparencia y confianza en la marca.

– Texturas y 3D: incorporan relieves que estimulan el sentido del tacto, enriquecen la experiencia sensorial y hacen que el producto sea memorable. También permiten resaltar elementos clave como logotipos o ilustraciones, aportando exclusividad y diferenciación.

– Sostenibilidad: utilizan materiales renovables que reducen la huella ambiental y responden a la creciente demanda de productos responsables con el planeta. En el caso de los envases de cartón para bebidas, su diseño facilita el reciclaje, permitiendo que, una vez utilizados, puedan reincorporarse a la cadena productiva dentro del ciclo de economía circular.

Finalmente, Pérez enfatiza que, en un entorno donde cada detalle cuenta para captar la atención del consumidor,

“el envase deja de ser un simple contenedor para convertirse en el embajador silencioso de la marca. Las tendencias que hoy lideran el mercado no solo redefinen la estética, sino que potencian la funcionalidad, la sostenibilidad y la conexión emocional con el consumidor”.